Culpa a las chicas por no verte.
A los chicos por verte demasiado
cuando quieres ser invisible.
Culpa después al entorno,
a los malos hábitos,
a los buenos.
Después repasa tu infancia,
examina tu adolescencia.
Las noches sin dormir;
los sueños.
Tú la ves. Está ahí,
marcando tu ritmo.
Ríe, está seria, vuelve a reír.
Natural, humana, normal.
Apenas un espejismo.