Cada día, un reto nuevo. Verse y no reconocerse; optar por seguir cambiando.
Me hablan de amor y sonrío: suspiro y siento envidia. De la sana, como un tomate cherry que brilla al sol. Nadie sabe nada ya. Me entretengo tejiéndome y luego me olvido de acabar.
Siempre con ese hilo colgando.
Una vida a medio hacer, entre dos aguas que me ignoran. No me entiende nadie, ni quiero que nadie lo haga. Entenderme es aburrirme, porque "yo soy así". ¡Tópico típico para el niño malcriado--
Pero yo he convertido mi mundo. Lo he moldeado a placer: la grasa, en músculo y nada; el tabaco, en aire limpio y paciencia; el alcohol, en agua y zumo y tés y leche; los helados, en fruta y ensaladas;
yo, yo mismo, en... Shhht.
Allá a lo lejos, demasiado lejos, unos ojos miran a alguien que no soy yo. O no miran. No saben verme, o no quieren. No importa, el resultado es el mismo, ¿no? Claro.
No importa, no me viene de aquí. Un fracaso más o menos se pierde en esta espiral de cambios.
¿Entiendes ahora? ¿Entiendes por fin?
- Nueva novela, espero acabarla este mismo verano.
5 comentarios:
Veo que es una novela, me gustaría leerla algún día. Te deseo muchos triunfos.
Saludos cordiales.
Tocayo tienes alguna novela tuya en el mercado?
Quiero leerla.
Besos
Me gusta =)
Si es un fragmento de una novela, pues me parece intrigante, psicologica. El narrador debe tener muchos conflictos internos.
Seria muy prematuro dar una opinion cuerda. Sin embargo, a priori, claro esta, seguro sera una aventura digna de leer.
Espero un ejemplar.
Un abrazo, viejo amigo.
Me gusta mucho. Se lo siente en una revolución silenciosa a Ud.
Es precioso el texto, como respirar profundamente cuando se te aclaran las cosas. Besitos!!!
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